“El 9”, uno de los primeros bares LGBT+ de la Zona Rosa que dejó huella

Ubicado en la calle de Amberes con el número 9, en la Zona Rosa de la Ciudad de México, el bar “El 9” fue un refugio icónico para la comunidad LGBT+ en la década de 1980; un lugar fundado por Henri Donnadieu, un empresario franco-mexicano, quien supo crear un espacio seguro en una época marcada por la represión y la homofobia.

Las autoridades organizaban redadas constantes, justificadas por una moral conservadora que buscaba acallar a la diversidad sexual en CDMX; en estos operativos, los asistentes eran hostigados y, en algunos casos, detenidos simplemente por reunirse en un espacio de libertad.

La historia del bar "El 9"

A pesar de estas adversidades, “El 9” se mantuvo como un símbolo de resistencia, además de ser un epicentro cultural que reunió a artistas, intelectuales y activistas, quienes encontraban en este espacio un respiro de la hostilidad de la sociedad.

Actualmente, el lugar que albergó a El 9 ha cambiado su apariencia y ha sido transformado en otros negocios y hoy pasó a manos del gobierno de la CDMX, y sólo se puede observar una placa en su fachada descuidada en donde se menciona que ese fue el bar “El 9” y que ahora es parte de la alcaldía Cuauhtémoc.

Un lugar que inspiró

Hasta hoy este lugar es recordado por muchos como un legado colectivo de la Ciudad de México, pues aunque ya no existe físicamente, su influencia en la lucha por los derechos LGBT+ sigue viva.

Este legado ha sido explorado en la cultura popular y en el mundo de la cultura y el entretenimiento, como sucedió con la serie "Tengo que morir todas las noches", disponible en Prime Video, narra la historia de este icónico lugar y su relevancia histórica. 

Además, el libro "Tengo que morir todas las noches" de Guillermo Osorno relata, con detalle y profundidad, el ambiente de aquella época y la importancia de El 9 en la vida nocturna y política de la Ciudad de México.